Durante los últimos años se ha popularizado la costumbre americana, por parte de los comerciantes, de realizar descuentos golosos durante la semana del Black Friday.
Tanto es así que ya se pueden encontrar ofertas en el sector médico. Pero hay que tener presente que la medicina tiene como finalidad la prevención y curación y que no se trata de un bien de consumo, ni puede ser tratada como tal.
Es por este motivo que desde el año pasado varias sociedades científicas nos alertan de los peligros de tratarse a precios bajos. Algunos de estos riesgos pueden llegar a ser: infección, contaminación viral o bacteriana, necrosis, pérdida de vista, inflamación de los tejidos, etc.
Las campañas de rebajas para la aplicación de tratamientos médicos son contrarias al código deontológico de la profesión médica y suponen importantes sanciones por parte de los colegios de médicos.
Tenga en cuenta que la publicidad médica debe respetar los valores de la profesión y no banalizar el acto médico, respetando los principios de autonomía, beneficencia, no maleficencia y justicia.
Encontrará nuestras indicaciones sobre publicidad dentro de nuestro Documento de Principios de Buena Práctica WMA recientemente actualizado.
Documento de posición del CoMB con relación a la publicidad de la actividad médica