Las redes sociales pueden constituir una herramienta muy útil y cada vez más habitual para la comunicación entre profesionales y sus pacientes. Sin embargo, es importante tener en cuenta diferentes aspectos relativos a la privacidad y confidencialidad de los datos personales, de ética médica, así como considerar en qué situaciones es adecuada su utilización y las ventajas y limitaciones que pueden presentar.

Para conocer con detalle estos aspectos, durante el año 2011 se realizó un análisis de las recomendaciones internacionales de diferentes instituciones y organizaciones sanitarias, sobre la forma más adecuada de utilizar las redes sociales por parte de médicos y estudiantes de medicina, con fines sanitarios. A continuación, se propone un primer decálogo que recoge los puntos más destacables de las guías de uso analizadas, que deben considerarse como recomendaciones generales y como una primera y amplia aproximación al tema. Publicado en: Mayer MA, Leis A, Mayer A, Rodríguez-Gónzalez A. How medical doctors and students should use Social Media: a review of the main guidelines for proposing practical recommendations. Stud Health Technol Inform. 2012;180:853-7.

Decálogo sobre el uso de las Redes Sociales para médicos:

  • Las Redes Sociales (RS) proporcionan nuevas vías de comunicación con los pacientes, el público en general y otros profesionales de la salud. Sin embargo, es necesario considerar diversos aspectos para garantizar un uso profesional seguro, útil y dentro de la legalidad y de los requerimientos éticos necesarios.
  • Configure niveles altos de privacidad en las plataformas y webs de las redes sociales. Aún en este caso, debemos tener en cuenta que no toda la información puede protegerse en Internet y lo fácil que resulta acceder a ella.
  • Es conveniente garantizar los estándares de privacidad y confidencialidad de la información de los pacientes, y asegurarnos de que ningún paciente pueda ser identificado por la combinación o la suma de información disponible en la Red. Igualmente, se debe respetar la propiedad intelectual de la información y de los contenidos.
  • Recordar que lo que se encuentra online probablemente estará para siempre, por tanto debemos tener cuidado con lo que decimos y cómo lo decimos.
  • Es recomendable no ofrecer consejos médicos personalizados en las RS. Si se utilizan para servicios de información general o promoción de la salud, es importante especificar claramente sus objetivos, características de uso y limitaciones. Debería incluirse en el registro de la Historia Clínica Electrónica cualquier interacción relevante que se haya establecido en las RS.
  • En general es prudente no establecer amistades electrónicas con nuestros pacientes actuales, sino es en el contexto de una relación médico-paciente. Algunas instituciones indican que si se trata de antiguos pacientes no es recomendable establecer dicha "amistad" online. Es importante separar siempre de forma clara los perfiles y contenidos personales y profesionales.
  • Deben seguirse las recomendaciones de la organización sanitaria para la que se trabaja en relación al uso de las RS. Si no están establecidas, debe considerarse seriamente sugerir su implementación lo antes posible, teniendo en cuenta que si es el caso, los servicios realizados en las RS deberían considerarse como un servicio más entre los ofrecidos por dicha organización sanitaria.
  • Indicar siempre cuando se está opinando o participando en una RS en representación de la institución para la que se trabaja, y si no es el caso, manifestar claramente que las opiniones son personales.
  • Si se encuentra identificado como médico, es recomendable que las opiniones y afirmaciones vertidas en las RS reflejen estándares adecuados de conducta y comportamiento profesional.
  • Cualquier forma de comportamiento inapropiado online puede potencialmente dañar la relación médico-paciente y/o con otros colegas. Debemos ser respetuosos también en los comentarios realizados sobre colegas y departamentos e instituciones de salud.